¿Qué son y qué regulan los aranceles?

29 de mayo de 2025

Seguro que has oído hablar mucho de ellos desde el escándalo con los precios a causa de las restricciones de Trump. Hoy te contamos qué son los famosos aranceles, qué regulan y para qué sirven.

Y si quieres estar al tanto de las últimas noticias económicas ,esto es para ti:

¿Qué son y para qué sirven los aranceles?

Los aranceles son tributos que se aplican a los productos que cruzan las fronteras nacionales, es decir, que son importados o, en algunos casos, exportados. Se trata de una herramienta clave de la política comercial de los países, ya que permite regular el comercio internacional, proteger la economía nacional o generar ingresos para el Estado.

Aunque el uso más habitual del término hace referencia a los aranceles de importación —es decir, los impuestos que se aplican a los productos que entran en un país—, también pueden existir aranceles a la exportación, aunque son mucho menos frecuentes.

Los aranceles cumplen principalmente tres funciones:

  • Recaudatoria: aportan ingresos al Estado que los aplica.
  • Proteccionista: protegen a los productores locales frente a la competencia extranjera.
  • Negociadora: se usan como herramientas en las negociaciones comerciales internacionales.

Un ejemplo claro: si un país quiere fomentar el consumo de productos textiles fabricados internamente, puede aplicar un arancel alto a las prendas importadas. De esta forma, estas resultarán más caras para el consumidor y se incentivará la compra de productos nacionales.

¿Cómo se establecen los aranceles?

Los aranceles no son aleatorios ni se aplican de forma arbitraria. Su establecimiento depende de las políticas comerciales de cada país o bloque económico (como la Unión Europea) y, en muchos casos, se negocian en tratados internacionales.

Algunos de los factores que influyen en la determinación de un arancel son:

  • El tipo de producto: no todos los bienes tributan igual. Algunos tienen aranceles muy bajos (como los bienes esenciales) y otros mucho más altos (como los bienes de lujo).
  • El país de origen: si el país tiene un tratado de libre comercio con el país importador, es posible que no se aplique ningún arancel o que se apliquen tarifas preferenciales.
  • El contexto económico o político: en situaciones de guerra comercial, por ejemplo, los aranceles pueden usarse como medida de presión o castigo.

En la práctica, los aranceles se establecen dentro de un sistema arancelario, como el Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías (SA), utilizado por más de 200 países. Este sistema clasifica los productos mediante códigos numéricos que permiten aplicar el arancel correspondiente según su categoría.

Tipos de aranceles

Los aranceles pueden clasificarse de distintas formas según su naturaleza, forma de cálculo o finalidad. A continuación, detallamos los tipos más comunes:

Según su forma de cálculo

Aranceles ad valorem
Son los más habituales. Se calculan como un porcentaje sobre el valor del producto importado. Por ejemplo, si se importa un coche valorado en 20.000 € y el arancel es del 10 %, se pagarán 2.000 € de arancel.

Aranceles específicos
Se calculan como una cantidad fija por unidad de producto, independientemente de su valor. Por ejemplo, 0,50 € por cada kilo de arroz importado.

Aranceles mixtos
Combinan ambos métodos. Por ejemplo, se puede aplicar un arancel del 5 % sobre el valor del producto más 1 € por unidad.

Según su finalidad

Aranceles fiscales o recaudatorios
Su principal objetivo es generar ingresos para el Estado, sin necesariamente proteger a la industria nacional.

Aranceles protectores
Buscan encarecer los productos extranjeros para proteger a los productores locales frente a la competencia internacional.

Aranceles antidumping
Se aplican cuando un país detecta que otro está vendiendo productos por debajo de su coste para ganar cuota de mercado de forma desleal.

Aranceles de retorsión
Se usan como represalia frente a medidas económicas hostiles adoptadas por otro país.

Según el sentido del comercio

Aranceles a la importación
Son los más frecuentes. Se aplican a los bienes que entran en el país desde el extranjero.

Aranceles a la exportación
Aunque menos comunes, algunos países los aplican para controlar la salida de materias primas estratégicas o para proteger el mercado interno.

¿Quién cobra el arancel?

El arancel lo cobra el país importador a través de su Agencia Tributaria o servicio aduanero. En el caso de la Unión Europea, por ejemplo, la gestión de los aranceles se realiza de forma coordinada por la Comisión Europea, aunque cada Estado miembro recauda lo correspondiente a su territorio.

Cuando una empresa importa productos desde el extranjero, debe realizar una declaración de aduanas y pagar el arancel correspondiente antes de que la mercancía pueda ser retirada. Este coste suele repercutirse en el precio final que paga el consumidor.

Los ingresos generados por los aranceles van directamente a las arcas del Estado o, en el caso de bloques económicos como la UE, a un fondo común que financia políticas comunitarias.

Además, los aranceles también pueden ir acompañados de otras medidas, como controles sanitarios, certificaciones de origen o inspecciones de seguridad, que encarecen aún más la operación.

Origen y futuro de los aranceles

Los aranceles no son una invención moderna. Ya en la antigüedad, civilizaciones como la romana o la egipcia aplicaban tasas a las mercancías que atravesaban sus fronteras. Durante la Edad Media, los aranceles eran comunes en los reinos europeos como fuente de ingresos para las arcas reales.

En los siglos XIX y XX, el arancelismo fue una herramienta clave para proteger a las industrias emergentes, especialmente en países en vías de industrialización. Algunos economistas históricos, como Friedrich List, defendieron su uso para permitir que las naciones desarrollaran una base económica sólida antes de abrirse al comercio internacional.

En la actualidad, los aranceles están en el centro del debate global. Por un lado, los tratados de libre comercio tienden a eliminarlos para facilitar el intercambio de bienes. Por otro, la aparición de conflictos económicos entre potencias (como Estados Unidos y China) ha reactivado el uso estratégico de los aranceles como arma comercial.

Además, en un mundo cada vez más globalizado, los aranceles deben convivir con nuevas realidades: cadenas de suministro internacionales, comercio electrónico, presión medioambiental y desafíos logísticos.

En este contexto, el futuro de los aranceles parece ir hacia una mayor sofisticación. Más que eliminarlos por completo, muchos expertos apuestan por un uso inteligente y equilibrado, que permita proteger sectores clave sin caer en el proteccionismo extremo.

¿De cuánta utilidad te ha parecido este contenido?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 5 / 5. Recuento de votos: 1

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

¡Compártelo!
Escrito por...
Equipo Dineo Crédito
El Equipo de Dineo Crédito está compuesto por profesionales apasionados por ofrecer consejos prácticos, herramientas financieras y soluciones inmediatas para cubrir tus necesidades económicas. Desde cómo gestionar tus finanzas hasta cómo sacar el máximo provecho de nuestros servicios, estamos aquí para acompañarte en cada paso.