Nuevos fraudes en internet y cómo evitarlos

Las mejoras en ciberseguridad obligan a la generación de nuevos fraudes en internet, cada vez más modernos y sofisticados. Los delincuentes tienen esa habilidad casi innata, implementando técnicas novedosas y reutilizando otras más antiguas, para el robo de datos e información personal. Reconocerlos y saber de qué manera nos pueden dañar es la principal baza para saber cómo evitarlos.

Hace un tiempo explicamos qué es el phishing, una de las principales y más conocidas formas de robarnos datos a través de internet. Su identificación es cada vez más rápida y los protocolos a seguir para evitarlo reducen el riesgo de sufrir un robo de nuestra identidad. Esto lleva a los ciberdelincuentes a buscar nuevos procesos o rutas para la extracción de información personal.

La ciberdelincuencia en auge

Los datos que aporta la Fiscalía General del Estado año tras año habla de grandes incrementos en ciberdelitos. Igualmente, los estudios realizados por el propio Ministerio del Interior sobre Cibercriminalidad en España son claros. Para que nos hagamos una idea del auge y crecimiento de los delitos en internet, desde 2016 se han triplicado hasta alcanzar, el año pasado, los 287.963 casos.

Los delitos informáticos consisten en diferentes acciones como el borrado, dañado, deterioro, robo o supresión de información sin autorización. Todo realizado desde la sombra, sin presencia física del ciberdelincuente, que se oculta detrás de un ordenador y al cobijo de una dirección IP. Esta situación dificulta, más si cabe, su detención por lo que la medida más eficaz que existe es conocer cuáles son los nuevos fraudes en internet y cómo evitarlos.

Nuevos fraudes en internet

Desde ASUFIN, la Asociación de Usuarios Financieros, revelan que más de la mitad de los usuarios de internet han sufrido algún tipo de ciberataque. Y hacen hincapié en dos nuevos métodos: 

1. Smishing

El Smishing es una nueva versión del conocido y famoso Phishing, pero que se realiza a través de teléfonos móviles. El objetivo principal de esta técnica es el robo de información personal de los usuarios para, posteriormente, chantajear y extorsionar a las víctimas. 

La forma que tiene el Smishing es la llegada de un mensaje o SMS a nuestro móvil con la que nos informan de una notificación importante desde alguna entidad bancaria, ministerio o la llegada de un envío de mensajería. Nos pedirán que hagamos clic en el enlace y rellenemos una serie de datos para poder acceder a la información o poder recibir el paquete. 

En otras ocasiones, el propio enlace contiene un software malicioso que, solo con acceder, nos robará toda la información de nuestro smartphone. Y ya sabéis que, hoy en día, nuestros teléfonos inteligentes guardan las tarjetas bancarias también.

2. Spoofing

Por su parte, el Spoofing es mucho más directo y la información que buscan son nuestras claves y datos de acceso a la app o plataforma de nuestra entidad bancaria. Alegan la existencia de un problema y que solo ellos pueden solucionarlo si les aportas estos datos. 

En el Spoofing no es necesario que aparezcan enlaces, no se andan con rodeos y solicitan tu acceso. Algo que, como veremos a continuación, NUNCA DEBEMOS HACER.

¿Cómo podemos evitarlos?

Más allá de las nuevas técnicas o innovaciones en ciberdelincuencia que vayan apareciendo, si queremos saber cómo evitar los nuevos y antiguos fraudes en internet el procedimiento es el mismo: 

1. Reforzar y actualizar nuestros dispositivos cada cierto tiempo, renovando y reforzando las contraseñas; 
2. No facilitar los datos bancarios ni información personal por mail, SMS ni cualquier otra vía; 
3. Revisar las cuentas bancarias de forma habitual, buscando movimientos o salidas de dinero dudosas o que no nos suena haber hecho;
4. Evitar abrir enlaces y descargar archivos extraños, es importante pasarlos antes por un programa antivirus; 
5. Dudar siempre cuando nos soliciten información personal y fijarnos si los enlaces que nos llegan presentan el protocolo HTTPS.

Conocer cuáles son los nuevos fraudes en internet y ahora que sabemos cómo evitarlos los ciberdelincuentes lo tendrán más difícil. Eso sí, su capacidad para innovar y buscar nuevas alternativas nos obligan a estar alerta y mantenernos informados en todo momento sobre ciberdelincuencia. Nuestra identidad e información personal está en juego y es muy fácil acabar en listados de morosidad como ASNEF por estos ciberataques.